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Capicúa. Volvemos. Todo sigue igual. La zorra de arriba sigue siendo una hija de puta redomada y la del primero no cesa en su empeño que los calores pre-veraniegos fermenten las heces caninas que adornan su piso, dándole otro aroma a la escalera.

Que mejor que volver con esta gentuza psicótica. Se acabó el Máster y ahora las únicas preocupaciones tienen que ver con nuestro trabajo en los Medios. Madrid en el Medio. El recorrido desde la última vez es largo y aburrido como para pegarse la charla. Desde un tibio día de febrero hasta hoy.

Ayer la grandisima hija de puta loca, antes conocida como la vecina loca, se armó de valor y a las 3 de la mañana se puso a hacer un zapateado que riete tú de Lola Flores. Espero que pronto, muy pronto le haga compañía.

La loca de los perros, con uno de ellos muy cerca de convertirse en mascota de la Faraona, sigue con sus olores y neuras. La última, decorar el cartel de la lectura del agua, con un AVISO, MIRAR AL 1ºB en tamaño 72 y que ocupa todas las celdas. Quien quiera apuntar la lectura del contador, que se joda, que mire al 1º B.

141 días desde que no actualizabamos el blog.